El wéstern crepuscular[cita requerida] (también llamado wéstern revisionista, anti-wéstern,[1] y a veces anti-wéstern revisionista[2][3]) es un subgénero cinematográfico derivado del llamado género wéstern (película "de vaqueros" o, más generalmente, "del Oeste"). Designado como una variación postclásica del wéstern tradicional, el wéstern crepuscular o revisionista subvierte el mito y el romance del tradicional mediante el desarrollo de los personajes y el realismo para presentar una visión menos simplista de la vida en el "Viejo Oeste". Mientras que el wéstern tradicional siempre encarna una clara frontera entre el bien y el mal, el wéstern revisionista no lo hace.
Temas revisionistas en el wéstern han existido desde comienzos del siglo XX, pero no fue hasta 1968, al relajarse las restricciones del Código Hays, que el revisionismo acabó suplantando al wéstern tradicional. Aunque muchos de los primeros wésterns han sido calificados de revisionistas, la distinción entre ellos suele ser borrosa debido a la variedad de temas y dispositivos argumentales. Algunos se califican de wésterns psicológicos por su énfasis en el personaje en detrimento de la acción y la emoción que predominan en el wéstern tradicional. Otras películas revisionistas, en las que la acción y la aventura siguen ocupando un lugar prominente, se denominan "wésterns indios" o "wésterns de forajidos/pistoleros" porque, en lugar del héroe tradicional, el protagonista es un nativo americano, un forajido o un pistolero. Los spaghetti wésterns de los años sesenta, que no estaban regidos por el Código Hays, fueron fuertemente revisionistas al presentar tramas moralmente ambiguas con un antihéroe o un villano simpático (o antivillano). A partir de 1969, el revisionismo se impuso en la producción de películas wéstern.